¿Cómo inicia Erich Wilpredt en la Actuación?

Empecé a estudiar desde los diecisiete años en el Taller Nacional de Teatro, un taller de formación que tiene el grupo Rajatabla, esos fueron mis primeros estudios teatrales.
Luego, fui a Londres a estudiar en Vigoft, una Academia de Actuación, allá estuve cuatro años. Paralelamente a eso trabajé con el grupo Rajatabla mientras terminaba mi carrera. Estudié Letras y Filosofía. Eso básicamente fue mi inicio, de la mano de un Director llamado Carlos Jiménez en el grupo Rajatabla donde estuve hasta el fallecimiento de Carlos. A raíz de ahí empecé a hacer otro tipo de trabajo escénico con otros directores y un poco más de cine.

¿Encuentra alguna diferencia entre la preparación obtenida en su país y la recibida en Londres?

Afortunadamente en la época en la cual estudié aquí la formación estaba muy bien, teníamos profesores que venían de Uruguay, Argentina”¦Tuve la fortuna de recibir clase por parte de René Torres, por ejemplo, me refiero a profesores de ese nivel, quien venía directamente del Odín de trabajar con Eugenio Barba.

Para ese momento, la formación estaba muy bien, de hecho yo me fui con ese concepto de insatisfacción que tiene todo estudiante, buscando un poco más afuera, pensando en qué esto no puede ser lo único, deben haber otras herramientas a las cuales no estoy teniendo acceso.

Viajé y para mi orgullo, en el buen sentido de la palabra, encontré que la formación que se estaba dictando aquí en esa época, porque hoy en día ha variado mucho, realmente estaba muy bien, es decir, no distaba en lo absoluto de lo que se podía aprender afuera.

Ahora sí, ahora el panorama ha variado, esos docentes que vinieron ya no están, algunos han fallecido y otros decidieron no permanecer aquí. No hubo una labor hacia la docencia, en la cual se formaran personas que conocieran sobre esos puestos que quedaron vacantes y ahora siento que la formación ha cambiado. Tal vez no es tan sólida como lo era anteriormente.

Sin embargo, hay personas como Elia Schneider en Caracas, que tiene toda una preparación al servicio de la docencia. Ella estudió en el guayu y trajo información para las personas que están recibiendo ese conocimiento. Eso antes lo veías mucho, ese tipo de esfuerzo en lo individual, colectivo o institucional. Había gran cantidad de escuelas, no sabías donde entrar y por dónde empezar. Ahora, un poco menos, siguen estando pero tienes que buscarlas un poquito más.

¿Qué herramientas emplea para preparar sus personajes?

Tiendo por lo general a ser mucho más Stanislavskiano que otra cosa, es básicamente la formación que recibí. Cuando estudié en Londres, el profesor venía del teatro del arte en Moscú, por cuatro años eso era el plato fuerte de tu formación actoral, pero no es lo único que utilizo. Afortunadamente, dentro del pensum, se veían otras tendencias, otros métodos como el de Grotowsky, Meyerhold, Breth y dependiendo de las circunstancias selecciono, aunque tiendo a ser más Stanislavskiano.

Vemos que es una persona preocupada por su formación académica, tal y como le sucedía al personaje que interpretó en la película “Puras Joyitas”. ¿Hasta qué punto se identificó con ese personaje?

En comparación cualitativa con Boys, no soy ni la enésima parte. Yo creo mucho en la formación y por ende he tratado de acercarme a eso, para obtener las herramientas que me permitan desarrollarme como actor, pero Safor Boy raya en una genialidad que obviamente no tengo. El manejo que él tiene de la información no es normal, es una cosa que excede cualquier límite conceptual, yo estoy un poquito más cercano a la norma.

¿Denos un significado simbólico de la palabra Actor?

Para mí la actuación tiene que ver más con la esencia y el espíritu que con cualquier otra cosa, si realmente quieres hacerle justicia a ese oficio como tal.

Que quiere decir eso, la generosidad por ejemplo, la entrega, son valores en los cuales creo y que para mí son pilares fundamentales de lo que implica el oficio del actor, aunque suene hipposo sesentoso, pero de verdad lo siento así.

¿Qué libros recomienda a los nuevos talentos que inician en el medio de la actuación?

Un actor debe leer de todo, absolutamente todo. Libro que te caiga en las manos, libro que debes leer. Aunque obviamente los clásicos de la literatura universal Shakespeare, Calderón, Itzen”¦Un actor no debe hacer caso omiso de toda esa información que está allí.

De métodos, por supuesto el trabajo de Stanislavsky es importantísimo como pilar imprescindible para cualquier actor, pero no sólo quedarse ahí porque no es el único, ese es el más sólido para mí pero eso es para mí. También está Meyerhold, Breth, Grotowsky, hay tratados de Gudín por ejemplo, hay una cantidad de personas que nos anteceden que han dejado un material de años de investigación.

Stanislavsky comenzó a llevar un diario cuando tenía diecisiete años y no paró nunca y los compendios tienen como quinientas páginas, es algo impresionante a nivel de lo basto de la información. Si una persona ya transito por ahí, decirse ahora yo continuó de aquí en adelante, no hacer caso omiso de eso. Leer todo lo que se pueda para mí es fundamental.

¿Qué consejo le das a quienes están incursionando en la actuación?

No pierdan la fe y estén conscientes de lo que implica el trabajo del actor. No es laborar en una empresa donde sabes que al final del año tienes una cantidad de beneficios y son parte del contrato. Aquí tienes que saber que es un trabajo itinerante, pero si es tu pasión no debes perder la fe.