¿Cómo empieza su carrera Artística?

Mi carrera inicia desde muy pequeña con eventos de colegio: todo lo que tuviera que ver con la «escena», ¡me hacía estar ahí! Hablando  profesionalmente, a la edad de 12 años, presenté un programa de televisión para niños del canal regional  Tele pacífico  llamado «Chiquinotas» en Cali, ahí trabaje un tiempo y me introduje en el medio.

Unos años después, a mitad de bachillerato, organizaron un fashion en el cual me moría por participar, pero al hablar con la directora del desfile, que era una chica de un curso mayor, me dijo que «ella solo modelaba con profesionales».  Esto fue tan duro para mi en ese entonces que no pare de llorar hasta que llegue a mi casa, le conté a mi madre y ella me dijo que no me preocupara, que yo iba a ser una gran profesional;  lo bueno de esto es que en realidad vinieron otras cosas más interesantes.

Es así como ingreso a estudiar modelaje en una escuela, realizando algunos desfiles, pero como dije en un principio, todo lo que tuviera que ver con la escena me encantaba y no solo me dedique al modelaje;  sino también al baile, dirigí sketch cómicos  e inventé obras de teatro con mis compañeros de colegio. Nunca olvidare «El Viruñas», una obra basada en el famoso mito de dicho nombre, creada por mis compañeros de clase y yo (Aida, Pilar, Augusto) la cual nos permitió hacer giras intercolegiales»¦eso fue increíble!!!

Luego, antes de terminar mi curso de modelaje, me llamaron de un casting para hacer parte de la compañía actoral «Niche», en éste fui seleccionada junto con otros compañeros que hoy en día siguen sus carreras (Paola Díaz, Martha Bolaños «la pupuchurra», Lucho Velásquez,  Alejandro Tamayo, entre otros). En esta escuela teníamos clases de canto, expresión corporal, dramaturgia, actuación; estudié casi cuatro años en donde fui definiendo mi gusto hacia la actuación más que hacia otras áreas. Las clases de actuación eran muy agotadoras y estrictas, con jornadas de ensayos hasta altas horas de la noche; fue una etapa muy difícil pues combinaba el teatro con el colegio, llegaba casi todos los días a las 11 de la noche a hacer tareas y al otro día me levantaba temprano para ir a clases. Las clases de teatro las dirigía Fabián Ramírez  actor de la vieja guardia del Teatro Experimental de Cali  TEC, hoy director de «Alcaraván Teatro» en Extremadura España, a quien le debo mucho ya que me enseño un gran respeto por esta profesión y me convocó para trabajar en su grupo en Cali.
 
Al terminar la escuela y el colegio, viaje una semana a Bogotá con el fin de hacer contactos para luego regresar e instalarme en esa ciudad; una vez en la capital comencé a trabajar en varias series con personajes poco importantes (Sabor a Limón, O Todos En La Cama, Candela) y luego me  seleccionaron para el reparto de la telenovela «Guajira». A partir de este momento mi carrera toma otro rumbo, uno más real y concreto.
 
¿Qué tan fácil o difícil fue entrar a la televisión?

No se si fue fácil o difícil, o tal vez un golpe de suerte, quizás tiene que ver con las ganas, el carácter, o si eres bueno o no en este oficio»¦no se en que consiste el tema.  Lo cierto es que la primera vez que viaje a Bogotá para hacer contactos, sentí mucho interés por parte de la gente que visitaba en los canales, lo cual me dio seguridad y ganas de regresar un mes después.  Una vez instalada en Bogotá, me empezaron a llamar al otro día: primero trabajé haciendo extras, luego me dieron personajes chiquitos en diferentes series y a los tres meses me llamaron para hacer parte del reparto de la telenovela «Guajira».

La hemos visto en Toilette, una serie que se trasmite en Colombia en el Canal Cosmopolitan, la serie está respaldada por un gran elenco de actrices argentinas y entre sus protagonistas se encuentra usted, como fue ese proceso de selección, su personaje y la experiencia en general de incursionar en esta serie.

El proceso de selección fue una locura. Yo trabajaba en un lujoso restaurante de Buenos Aires como jefe de una de las áreas, tomaba mis clases de actuación en la universidad e iba a los castings que mi representante de Argentina me conseguía, hacia muchas cosas al tiempo que me dejaban agotada. Fue así como pedí dos días de descanso en el restaurante y planeé irme al «Tigre» con unos amigos. Cuando iba de salida mi representante me llamó y me dijo que estaba convocada al casting de Cosmopolitan justo en esos dos días»¦ ¡no lo podía creer! Me mandó la escena por internet y mis días de descanso se convirtieron en ensayos, fue muy chistoso a la vez, pues mis amigos me hacían la contraparte mientras me aprendía la letra. Después se me complicó todo porque no había mucha información acerca de lo que querían ver en el casting, por ende no sabía hacia donde dirigir mi propuesta: la escena era larguísima, con diálogos muy cortos, casi frases y con la participación de todos los personajes al tiempo, era muy libre la consigna, prácticamente me dieron a elegir el personaje para el casting, tal vez fue lo único que hice como propuesta.

«El Tigre» es un lugar que queda en uno de los deltas del Rio de La Plata en Buenos Aires y para ir más adentro, toca transportarse en lancha: nosotros estábamos adentro. El día del regreso, es decir el día del casting, la lancha no pasaba, y yo me estaba enloqueciendo porque ya era tarde y no quería perder la audición. Finalmente llego la lancha»¦tarde pero llegó. Me fui volando a mi casa, me bañé, cogí algo de vestuario y de ahí a la productora. Una vez en el lugar, pensé que había perdido el turno porque llegué media hora tarde, pero no, me dijeron que la directora aún no había llegado y que posiblemente se habría demorado un rato más. Hasta ese momento todo marchaba bien, había logrado tranquilizarme un poco, pero seguía nerviosa porque aún no tenía mi propuesta para el casting. Cuando me llamaron para audicionar le conté a la directora mi dificultad, no me puso problema por el contrario me animó y me dijo que me que me olvidara de todo, de la letra, de las ideas, de todo, que íbamos a improvisar.

Adicioné con tres chicas más, nos hicieron improvisar a todas, el casting era ese, pura improvisación, la directora se inventaba las escenas que se le iban ocurriendo, nos hicieron hacer monólogos con situaciones previas, yo creía que era difícil pero no tenía remedio, ya estaba entregada a la pura actuación, a aquella que me apasionaba y que me hacía olvidar lo demás así que traté de divertirme. Cuando lo hice en mi monologo dije hasta lo inimaginable, fue muy curioso, tuve la sensación de haber entrado en código con la directora y la producción; me encantó haberlo hecho de esta manera y que hubiese sucedido de este modo, sobre todo con los contratiempos que tuve.

Otra experiencia linda de este casting fue que me pude expresar como quise, no me dijeron que neutralizara el acento colombiano, me dijeron que hiciera lo que quisiera siempre y cuando mantuviera determinadas pautas; eso me transportó y me permitió disfrutarlo mucho más. Al otro día, antes de salir hacia el restaurante, me llamaron para decirme que había sido seleccionada.

La experiencia con «Toilette» fue increíble, me encanto la propuesta: «Este programa explora el universo femenino desde una cámara subjetiva puesta detrás del espejo de un toilette de damas adentro de una empresa»»¦ (Más info en www.cosmopolitan.tv). La dirección de Alejandra Ciurlanti, los libretos  de Liliana Escliar, la misma de «Mujeres Asesinas»: Tuvimos tiempo para ensayar con anterioridad durante casi tres semanas, pues las escenas parecían teatrales, cosa inusual en el medio televisivo. No podíamos hacer cortes en caso tal de cometer algún error pues se filmaba a una sola cámara; las tomas eran casi únicas y el encuadre también, todo era muy exacto, una producción muy especial. El reparto fue excelente, las argentinas Viviana Saconne, Agustina Cherry, Agustina Lecouna y la mexicana Ana Carolina Valsagna fueron muy profesionales y se caracterizaron por ser buenas compañeras; hoy en día nos mantenemos en contacto, en especial con Carolina y su familia.

«Toilette» fue mi primer trabajo internacional, fue una linda experiencia que aun se puede ver por el Canal Cosmopolitan en diferentes países de toda Latino América.

¿Porque nace la idea de hacer televisión en Argentina?

No fue un propósito sino un devenir.  Viaje a Argentina porque gané una beca para estudiar teatro. Luego vino el casting.

¿Actualmente se encuentra en otro proyecto de televisión en Argentina o piensa volver a la televisión acá en Colombia?

Ahora estoy en París escribiendo una obra de teatro, haciendo un trabajo con la fotógrafa Veronique Durruty y tengo proyectos para actuar en el cine. Estuve en Colombia hasta hace poco presentando mi obra en el «Teatro Varasanta» y realizando varias audiciones para televisión y cine. Ojalá se concreten pues Colombia está mi casa, mi cultura y siempre estaré dispuesta a trabajar en mi país.

¿Cuál es el personaje que anhela hacer

Los que todavía no he hecho, no tengo preferencias.

¿Qué siente cuando actúa?

Es una pregunta muy rara, nunca me la había planteado. Puedo afirmar claramente que antes de actuar siento emoción y un poco de vértigo, después experimento una adrenalina como si acabara de correr una maratón. Pero en el momento no se, tal vez nada, tal vez porque estoy ejecutando lo que hago.
 
¿Que película lleva en su mente y por que la recomendaría?

Una película francesa que se llama «Exiles» dirigida por Tony Gatlif, la película ganó la Palma de Oro al Mejor Director en el Festival de Cannes 2004.  Se trata de la búsqueda de las raíces a través de la ruta que separa Francia de Argelia, la cual deciden recorrer los protagonistas para descubrir el camino que hicieron sus padres tiempo atrás buscando una mejor vida. Este film recorre los sentimientos de los hijos de los inmigrantes y la curiosidad permanente por explorar su pasado; la vi en Buenos Aires así que el tema me venia perfecto, además de estar pasando por un momento parecido en relación a búsquedas internas. Esta película la recomiendo porque la puesta en escena es increíble, la fotografía me encanta, tiene muy pocos diálogos, la banda sonora es muy sensible, los personajes son bellos, es la mejor película que he visto en toda mi vida y se que decir esto ahora es un juicio bastante prematuro, pero así es. Esta película es lo que considero: belleza. Si la pueden ver en el cine, mejor
 
Denos un significado simbólico de «Actor»

Un actor es un «bicho raro». Es una persona que se para en un escenario y otra lo ve.
 
Denos un tip para la memorización del texto

No tengo uno concreto, depende del texto y de mi estado de animo, tal vez los mas difíciles para mi son los de teatro y los de cine. A veces me funciona la memoria fotográfica, otro día me aprendo el texto mientras camino, o leo la contra parte, o lo memorizo cuando hay mucha gente y mucho ruido, por ejemplo escuchando música o en el transporte en el que me movilizo a veces puedo parecer loca porque hablo sola. Algunas veces subrayo el texto para memorizarlo de manera rápida y efectiva.  

¿Qué herramientas utiliza para preparar sus personajes?

En principio, cuando empiezo a trabajar un personaje, tengo la idea que los actores no sabemos quienes son nuestros personajes, es pura «lluvia de ideas».  Creo que es un trabajo que se va profundizando con el tiempo que se pule en conjunto a medida que se ensaya, de ahí salen los personajes, de la prueba y el error, no existe una herramienta única o una clave mágica, es el producto de un trabajo arduo y pesado.
 
Vemos también que usted es guionista cuéntenos un poco sobre esta faceta.

Si, fue para la película «El Carro» dirigida por Lucho Orjuela, fue la película colombiana más taquillera del 2003 y se ubicó en el quinto lugar dentro de las películas más vistas a nivel nacional e internacional en el año 2004 en Colombia. Esa etapa fue muy reveladora, ya que nunca pensé escribir un guión para cine.

Fui convocada por Luis Fernando Ardila (Q.E.P.D) mientras terminábamos de grabar la telenovela «Milagros de Amor», me llamó para hacer parte del grupo de guionistas «Los Arcanos» dirigido por Dago García, nos reuníamos  todos los domingos a las 10 de la mañana porque era el único espacio que teníamos, trabajamos casi seis meses, fue muy enriquecedor; todos llevábamos ideas y Dago las iba organizando: peleábamos, debatíamos, alargábamos momentos, desglosábamos los personajes, llevábamos historias personales o a veces simplemente echábamos «carreta» y tomábamos tinto; por ejemplo, la escena donde la hija se escapa en el carro, sale a raíz de una experiencia personal cuando pequeña»¦lindo que eso haya quedado en el film, lindo el trabajo de todos!  Del mismo modo le debo mucho al grupo, pues cuando me salió la beca para estudiar teatro en Argentina me regalaron el pasaje, para mi era algo más que un grupo de trabajo.

Luego fue muy emocionante ver en el estreno del film, que los  diálogos que habíamos escrito, que cada punto y cada coma, eran interpretadas por los actores: fue genial darle vida a los personajes, esta vez desde la escritura y no desde la actuación, toda una experiencia que me llevo a prestarle más atención a mis ideas y a lo que escribía. El tema de la escritura es algo que me gusta mucho, pero no es algo a lo que me dedico todo el tiempo. 
 
¿Cual es el personaje que más ha marcado la carrera de Andrea Quejuan?

Creo que el que interpreté en la obra de teatro «Solo Un Momento» (Uniperformance), la pieza fue estrenada por primera vez en el sótano del «Café Gaitán» en Bogotá en el 2005 y luego presentada en Argentina en diferentes salas de la ciudad de Buenos Aires; la presenté en Bogotá por última vez el año pasado en el Teatro Varasanta. El personaje se llama «Ana» quien experimenta varias situaciones de lo que ella llama «amor», la obra se realizaba en espacios no convencionales, en una esquina, un cuadrado de 3 x 3 metros aproximadamente; esto quiere decir que tenia el publico muy cerca, a veces rompía su espacio haciéndolo parte del espacio escénico, creaba ambigüedades entre lo real y lo ficticio: a veces era Ana quien hablaba y otras veces yo.  Este trabajo era muy exigente, requería de una preparación física importante pues estaba sola en escena durante casi una hora. Fue interesante porque me permitió debutar como actriz y escritora al tiempo (esta obra la escribí en Buenos Aires mientras cursaba la universidad) y porque creamos con Cesar Badillo, director de la obra, (también actor, director y dramaturgo del «Teatro La Candelaria» de Bogotá), el grupo «Proyecto Teatro de Esquina»
 
¿Cómo ve la situación en cuanto a los derechos del actor en Colombia? ¿Necesitamos un sindicato para que los derechos del actor sean planteados?

La situación en Colombia es precaria, yo la veo atrasada. Esto no quiere decir que niegue algunos adelantos, sino que analizo la problemática en relación con otros países. Un ejemplo de esto se vio durante la producción de «Toilette» en Argentina, teníamos horarios de llegada y salida y si faltabas te descontaban; hubo faltas por parte de la producción porque se colgaron unas escena que nos hicieron pasarnos del tiempo pautado; a mi y a todo el elenco nos pagaron ese tiempo extra, lo cual me parece lógico teniendo en cuenta que actuar es una profesión como cualquiera, con horarios y tiempos que cumplir; esos pagos fueron posibles por las gestiones de ley que tiene Argentina con sus actores y por el sindicato; teníamos un veedor, quien nos visitaba todos los días, contabilizaba los tiempos de grabación, nos hacia firmar fichas de asistencia y nos preguntaba si todo iba bien con la producción. En Colombia se empezaron a gestar los derechos del actor desde hace tiempo, el tema no es de ahora, sino que ya que se vuelve a tocar el tema hay que seguir, pero estudiándolo muy a fondo e informando a todos para evitar confusiones, no solo al gremio.
 
¿Que le puede decir a esos padres que ven la actuación como una carrera no seria, y de poca reputación, o inalcanzable?

Que lastimosamente esa es la imagen que se tiene de este oficio, es una imagen que se le adjudica al medio artístico por tener un carácter expresivo, sinónimo de «rebeldía».  Pero esto es una profesión como cualquiera, que tiene sus realidades sobretodo en lo lucrativo porque es inestable, aunque en otros países no lo es tanto; tal vez seria bueno combinarla con un trabajo estable. Los padres tienen miedo de que sus hijos tengan contacto con la drogadicción, el alcoholismo y otros tantos mitos y cosas que giran en torno al medio artístico, pero quiero aclarar que esto no es exclusividad de los actores, se puede ver en cualquier medio, inclusive hasta en una familia corriente.  Si un padre confía en la crianza y educación que le da a su hijo entonces, ¿cuál es el problema? Tal vez la imagen de «carrera no seria y de poca reputación» radique en la falta de información, que lo único que produce son ficciones. 
 
¿Qué libros puedes recomendar a los que se están preparando?

Para los que se están preparando no creo que deban leer libros técnicos para actuación porque pueden confundirlos, sino libros que les ayuden a definir si realmente quieren seguir esta profesión o no»¦después viene la teoría.  Para esto recomiendo libros escritos por los mismos actores, que narran sus propias experiencias, como por ejemplo el libro «El Actor y Sus Otros» del colombiano Cesar Badillo, no es un libro comercial, lo encuentran en el Teatro La Candelaria; otro «Un Actor a La Deriva» de Yoshi Oida, actor del «Theatre Des Bouffes Du Nord» dirigido por Peter Brook, lo encuentran en cualquier librería o sino lo pueden pedir por internet; entre otros.
 
¿Qué consejo les das a los jóvenes que están luchando para estar dentro del medio como es el teatro, el cine y la televisión?

Que si realmente les gusta este oficio, tendrán que saber que actuar no es una elección ni una decisión momentánea: entrar en el medio no debería ser la meta de un actor, actuar no es entrar en el medio, es mucho más complejo que esto. Se pueden iniciar experiencias en escuelas, cursos, talleres o libros, que les ayuden a plantearse otro tipo de objetivos con referencia a este oficio.  Actuar es una profesión y si esto se logra entender, el resto es experiencia y teoría.