Muchas veces comparo la actuación con la pintura. Primero se aprenden las diferentes técnicas como la combinación de colores, la perspectiva, el uso de la profundidad, la luz, los diferentes tipos de pinturas (óleo, acrílico y demás).
Se estudia a los grandes maestros y sus obras y finalmente, cada uno decide qué le sirve y qué desecha de lo que ha aprendido y LLEGA LA CREACIÓN DE UN ESTILO PROPIO UNICO.
Eso se logra cuando se deja a un lado el miedo, se aventura y uno se empieza a apasionar y divertir.
Siempre con RESPETO, pero DIVIERTANSE! Aproxímense a cada personaje como si fuera un amigo: cada amigo es diferente, cada uno tiene virtudes y defectos, una manera de moverse, de comportarse, de pensar, una voz, un estilo de vestir…así uno no esté de acuerdo con un amigo, el truco está en tratar de no juzgarlo, dejar toda resistencia a un lado y ENTENDERLO.
Hay que entender siempre al personaje. Nada es gratuito. Hasta la manera cómo mueve una mano debe tener una explicación para el actor que lo interpreta.
Tengan disciplina, aprendan sus textos al derecho y al revés, ESCUCHEN SIEMPRE A SUS COMPAÑEROS EN ESCENA y fuera de ella y jamás sub – estimen a nadie que de todos puede uno siempre aprender algo!
Bienvenidos y Buena suerte!
Tania Falquez.