¿Por qué Mérida es considerada la Ciudad del Cine en Venezuela?
Mérida, conocida por su belleza natural y su clima fresco, no solo es un destino turístico privilegiado en Venezuela, sino también el epicentro del cine nacional. Apodada como «La Ciudad del Cine», esta urbe andina se ha consolidado como un espacio de creación, proyección y, sobre todo, formación cinematográfica.
Jesús Rondón, director y productor de cine, considera que «La Ciudad del Cine» es un título simbólico. Señala que, en realidad, la primera ciudad venezolana donde se estrenó una película fue Maracaibo (estado Zulia), el 28 de enero de 1897, con las proyecciones de Muchachos bañándose en la laguna de Maracaibo y Un célebre especialista sacando muelas en el Gran Hotel Europa. Sin embargo, Mérida comenzó a ganarse este título por su papel crucial en la consolidación del cine nacional.
Uno de los hitos más importantes ocurrió en 1968, cuando Mérida fue sede del Primer Encuentro de Cine Latinoamericano, un evento que marcó el inicio de su vínculo con el cine. Este encuentro fue apoyado por Pedro Rincón Gutiérrez, conocido como «el Rector de Rectores», quien impulsó la creación del Departamento de Cine, que más tarde evolucionaría en el sólido aparato cultural que conocemos hoy.
Además, entre 1980 y 1990, Mérida albergó el Festival del Cine Nacional, un espacio que destacó por reunir a los principales exponentes del cine venezolano. Este evento renació en 2005 como el Festival del Cine Venezolano, consolidando a Mérida como su sede principal hasta el 2023. Estos eventos históricos no solo fortalecieron la industria cinematográfica local, sino que también posicionaron a Mérida como un punto de encuentro para cineastas y amantes del séptimo arte.
Un semillero de talento cinematográfico
El vínculo de Mérida con el cine también se sustenta en instituciones como la Universidad de Los Andes (ULA). Inti Torres, guionista, director, productor y profesor de medios audiovisuales en la ULA, destaca que la formación cinematográfica en la región se encuentra fuertemente vinculada a la Escuela de Medios Audiovisuales (EMA). Según Torres, esta escuela ha contado con grandes maestros como Camilo Pineda y Alberto Arvelo, quienes han sido pilares en la enseñanza del cine. Además, señala que la EMA es considerada actualmente como la mayor casa productora de Venezuela, ya que cada semestre genera decenas de cortometrajes estudiantiles de notable calidad.
Torres resalta que los egresados de la EMA suelen ocupar roles fundamentales en la industria audiovisual, desempeñándose en áreas como dirección de fotografía, producción, sonido y cargos gerenciales. Asimismo, menciona que los paisajes naturales de Mérida no solo inspiran a los estudiantes locales en sus proyectos, sino que también atraen a cineastas de otras regiones. Ejemplo de ello son películas como Una Vida y Dos Mandados de Alberto Arvelo y Sangrador de Leonardo Henríquez, que aprovecharon los espectaculares escenarios andinos.
En la actualidad, Mérida sigue siendo un punto clave para la producción cinematográfica. Entre los proyectos recientes se encuentran Un Actor se Prepara de Inti Torres y Camilo Pineda, y Hombre de la Luz de Cristian Márquez, grabada en el pintoresco pueblo de Los Nevados. Sin embargo, Torres advierte que para que Mérida se consolide como un destino aún más atractivo para producciones cinematográficas, es crucial atraer inversión y financiamiento que potencien el desarrollo de la industria en la región.
Con una combinación de talento, recursos naturales y una sólida formación académica, Mérida continúa reafirmándose como un epicentro del cine en Venezuela, llevando la esencia de los Andes a la gran pantalla.
Por: Oriana Salas