Uno de los actores más reconocidos en el país que no sólo se desenvuelve frente a las cámaras, sino, que además Mario Ruiz es íntegro, hace de la música un elemento primordial para el fortalecimiento de su pasión por el arte; se convirtió para toda Colombia en uno de los mejores maestros del arte dramático, rol que lo caracterizó en uno de los programas más vistos en el país «Protagonistas de nuestra tele», toda su labor y su trayectoria no solo lo ha encasillado en la televisión como actor sino que , además tiene la habilidad para el doblaje de personajes famosos del mundo animado. Actuemos.net se tomó la tarea de ir más allá y por eso tiene para todos los lectores los consejos y anécdotas de Mario Ruiz durante toda su vida profesional.

¿Cómo empieza su carrera Artística?

Desde niño estoy en el medio y realmente no recuerdo cuándo fue la primera vez en que estuve frente a una cámara de televisión. Pero comencé con los tele teatros en vivo que se realizaban en los años sesenta. Recuerdo uno en especial en el que actué con Yudy Henríquez y Carlos Muñoz, en 1964, y que se llamó «Horas de Angustia», escrito y dirigido por Jaime Velásquez. En teatro debuté en 1966 con la obra «Galileo Galilei», dirigido por Santiago García, y con la que hicimos una temporada en el Teatro Colón.

¿Qué recuerda de aquellas épocas cuando hizo televisión siendo niño? Estamos hablando del Programa «Tú y Yo».

Del «Yo y Tú» tengo gratos recuerdos. De niño participé en algunos capítulos, cuando el programa se hacía en vivo. Después de graduarme de bachiller, Alicia Del Carpio me dio la oportunidad de ingresar al elenco, comenzando verdaderamente mi carrera profesional, al lado de la propia Alicia y de «monstruos» de la comedia como Pepe Sánchez, Franky Linero, Consuelo Luzardo y el Gordo Benjumea. Yo tenía 17 años y el programa se grababa en Inravisión, en los desaparecidos estudios de la calle 24.

Trabajar con grandes directores como: Bernardo Romero Lozano, Boris Roth, Bernardo Romero Pereiro, Alvaro Ruiz, David Stivel, Pepe Sánchez, Jaime Santos, Julio César Luna, Jaime Botero, Víctor Mallarino, Roberto Reyes, Felipe Martínez, entre otros. Siendo estos grandes directores de la televisión colombiana. ¿Qué aportaron a su experiencia como actor?

De todos se aprende y lo sigo haciendo hoy en día, cuando a esa lista se han agregado nombres como los de Sergio Osorio, Ricardo Gabrielli y Lilo Vilaplana. Del Maestro Bernardo Romero Lozano aprendí además el gusto por la lectura y el interés de ampliar mis conocimientos en cualquier tema, desde Historia Universal hasta deportes. De su hijo Bernardo aprendí el manejo de cámaras, no solo viéndolo en acción, sino recibiendo algunas clases que me impartía, robándole el tiempo en sus horas libres. De David Stivel aprendí la disciplina del oficio, la búsqueda de la perfección y cómo entender mejor las situaciones de los personajes en cada escena, además de tenerlo como amigo en momentos determinantes de mi vida. De mi padre, el amor por la profesión. De Víctor Mallarino, otro de mis grandes amigos, el placer de ver cómo despliega su talento e inteligencia y cómo saca lo mejor de cada actor, ofreciendo las herramientas para que encuentren su personaje. Como dije al principio, de todos se aprende.

Lo vimos como profesor en Protagonistas de Nuestra Tele, muchos artistas no gustan de este tipo de programa, porque consideran que solo se vende una imagen, conflicto, entre otras cosas. ¿Qué piensa de este formato de televisión, siendo usted un profesor de estos participantes?

Confieso que llegué con ciertas reservas, pero me pareció que debía dejar de criticar ese formato y más bien, intentar entrar en él para aportar en la formación de aquellos que quieren seguir nuestros pasos. Viéndolo así, surgió mágicamente mi vocación en cada clase, y la relación con cada uno de ellos fue muy constructiva de lado y lado. Es cierto que la producción destaca no solo la formación de los actores, buscando otros elementos que suban el rating. Pero me queda la satisfacción de haber motivado genuinamente a mis estudiantes. Cada clase duraba al aire pocos minutos, pero en realidad me encerraba con ellos por más de dos horas, y nos salíamos de la cátedra de dicción para adentrarnos en temas como la construcción de personajes, la preparación de un actor, y los ilustraba en los diferentes géneros como el drama y la comedia y la actuación para teatro, televisión y cine. En conclusión, tal vez se resalten las situaciones un tanto banales, en donde los conflictos de convivencia tomen ventaja sobre la formación actoral, pero sé que en algunos de nuestros estudiantes despertamos conciencias.

En Protagonistas, vimos como enseñaba dicción, cosa que logró caer en cuenta a María Angélica en su forma de hablar ¿Cómo enseñar a una persona a vocalizar sabiendo que nunca ha tenido este tipo de formación? ¿Qué tan complicado es lograr un acento neutro en estas personas?

En el caso de María Angélica, su problema no era el acento. Siempre expuse que Mauricio, otro de los concursantes, siendo igualmente costeño, tenía una estupenda dicción. Superar los problemas de vocalización y dicción ya dependerá de la propia María Angélica y de su compromiso con su propia superación. Ella es absolutamente consciente de sus limitaciones y puede progresar. Tiene cómo hacerlo. En caso de estancarse, corre el peligro de que la encasillen con personajes prisioneros de su forma de hablar. Lograr el acento neutro no es fácil, cuando, como ella misma decía, nadie le había hecho caer en cuenta de sus problemas. Fue al enfrentarse al mundo del reality en donde comprendió el inmenso reto que tenía por delante. Ahora, haber sido la ganadora le significa una oportunidad de oro. La atención del canal RCN está con ella. Debe exigirse y puede exigirle a quienes tienen el poder de decisión que le ayuden a mejorar.

Sabemos muy poco sobre el mundo del doblaje, usted fue la voz oficial de Bugs Bunny para América Latina, cuéntenos sobre esta experiencia. ¿Cómo se trabaja en este tipo de proyectos?

Primero que todo, para lograr la aprobación de alguien como Warner Bros hay que pasar por muchos filtros. A mí lo que me ayudó fue mi manía de hacer voces desde pequeño, y que cuando llegó el momento, la persona que estaba autorizada para hacer la voz del famoso conejo, un mexicano, no estaba disponible para una producción musical que se iba a montar en Colombia en 1990. No solo logré a través de un casting que fue enviado a Estados Unidos, ser la voz para ese musical, sino que además me convertí en la otra voz oficial de Bugs para el resto del continente. Doblar caricaturas es muy divertido y ya había tenido esa experiencia cuando viví en Los Ángeles. De los mexicanos aprendí todos los «trucos» del negocio, cómo ver una escena y doblarla enseguida, sin más ensayos que esa única oportunidad en que te la proyectan antes de grabar. Hay que estar muy concentrado. Es más difícil cuando doblas a un actor de carne y hueso, porque hay que estar pendiente de su fraseo, de su respiración y de sus gestos. Aunque hay que decir que con las técnicas de computación modernas, ya encontramos también todo eso en los personajes animados.

Estudió actuación en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), USA, ¿Recomienda usted estudiar en el extranjero para lograr ser un buen actor?

No necesariamente. Aquí hay mucho talento, mucha gente que puede enseñar. En Colombia lo que hay que erradicar, como en muchos países, es la ambición del que llega al medio con el único interés de figurar, de pertenecer a la farándula. Pero el compromiso de formar actores de verdad lo tienen algunas universidades y academias serias en éste país. Ahora, es bueno salir, y como un actor no deja nunca de aprender, siempre puedes ir y volver, aprender de otros medios, comparar escuelas y métodos de actuación.

¿Cuéntenos sobre la banda en la está tocando ahora?

«La Banda de Corazones Solitarios» constituye un espacio en el que me entrego a mi gran pasión, la música. Allí canto, toco la guitarra, la armónica y los teclados. Somos especialistas en los temas de los Beatles, pero hemos ampliado el repertorio sin salirnos del género del rock, haciendo algo de los Stones, de Chuck Berry, Elvis y otros, también en español. Mi mayor satisfacción es que estoy en un grupo profesional, con músicos muy bien formados, y trabajamos en serio, como se puede dar cuenta el público que asiste a nuestros conciertos.

Cuéntenos sobre su último proyecto, «la Mariposa»

Este es un proyecto de gran presupuesto de Fox Tele Colombia para el canal RCN. Es una historia muy interesante, en donde una mujer, la mariposa, que pertenece a la alta sociedad, termina involucrándose con el bajo mundo. Como comprenderán, no puedo adelantar detalles sobre la historia, pero les cuento que interpreto a un político corrupto que busca financiar campañas con dinero del narcotráfico.

¿Qué siente cuando actúa?

Satisfacción de hacer lo que me gusta. Me siento iluminado y afortunado. Es lo mismo cuando canto.

¿Qué película lleva en su mente y por que la recomendaría?

Recuerdo mucho «Romeo y Julieta» de Franco Zefirelli, una película de finales de los años sesenta. La recomiendo porque es la perfecta unión de dos lenguajes, el teatral y el cinematográfico.

Denos un significado simbólico de «Actor»

Ser actor es en sí mismo un símbolo de nuestra sociedad, porque refleja el mundo y al mismo tiempo lo cambia.

Denos un tip para la memorización del texto.

La asociación de ideas ayuda enormemente. Confieso que tengo la gran suerte de una mente que memoriza rápidamente los libretos.

¿Qué herramientas utiliza para preparar sus personajes?

A veces parto de lo particular, del personaje influyendo en el mundo que lo rodea. Pero se puede hacer el proceso a la inversa, comenzando con lo general, estableciendo cómo la historia influye en el personaje. Tomo los elementos que los libretos me dan para construir una historia, un trasfondo, una biografía, sus relaciones con los otros personajes de la historia, y así salen poco a poco a flote sus gestos, su manera de decir las cosas, sus emociones y cómo las maneja o cómo éstas lo manejan, sus reacciones a cada situación. La visión del director es significativa igualmente, lo mismo que la manera en la que interactúas con tus compañeros. Aunque al final, a la hora de grabar o al estar frente al público, estás solo, con tu cuerpo, tu voz y tus emociones al servicio de ese personaje que te han encomendado, y cuando se siente la magia que todo ese proceso ha creado, ya no te puedes quedar ahí, esa magia es efímera, dura un segundo. Entonces, hay que crearla una y otra vez mientras dure la novela, la serie o la obra de teatro. Es un trabajo hermosamente agotador.

¿Qué les puede decir a esos padres que ven la actuación como una carrera
No seria, y de poca reputación, o inalcanzable?

Ese fenómeno, esa prevención se pierde cada vez más en el pasado, afortunadamente. La generación de mi padre sufrió más que la mía con ese tonto recelo. Y creo que los nuevos actores ya no lo ven como un obstáculo serio, aunque se puedan dar casos hoy en día.

Actor y/o Actriz favorita

No tengo uno en especial. Pero mi grupo de favoritos lo conforman Pacino, De Niro, Penn, entre otros. Incluyo también a Ricardo Darín. Y en las mujeres Streep y Dench. En Colombia Alejandra Borrero, Marcela Benjumea, Víctor Mallarino y Luis Eduardo Arango.

Cantante y Género musical Favorito

Paul McCartney, el rock y pop, las baladas, y un rincón para lo clásico.

¿Qué libros puedes recomendar a los que se están preparando?

Todo el material de lectura que se relacione con el «método», que es como se denomina a la escuela surgida con Kazan y Strasberg en el Actor’s Studio, y que se origina en los principios de Stanislavski.

¿Qué consejo les das a los jóvenes que están luchando para estar dentro del medio como es el teatro, el cine y la televisión?