Una extranjera llego a Colombia, sin saber que cambiaria la historia del teatro en este país. Hoy Fanny Mikey es una actriz que ha sabido ganarse a los colombianos, con empeño y dedicación, esta empresaria del teatro, cada dos años se llena de un gran trabajo, entretener a los Colombianos.
|
Cuando se trata de soñar no hay quien se niegue hacerlo. Al fin y al cabo, como muchos dicen por ahí, la imaginación no tiene límites. Los deseos del corazón simplemente suben a la mente y se aprovechan de esta para crear mundos y expandirlos hasta parajes habitados de personajes, momentos y escenarios en los que realmente quisiéramos vivir. Pero cuando se trata de reunir todo aquello, expulsarlo de la cabeza y traerlo a la realidad, muchos se quedan ahí bloqueados por las excusas de siempre que impiden la realización de aquellos sueños que por instantes nos hacen sonreír. ¡Gracias a Dios no todos son conformes! hay quienes simple y sencillamente no pueden vivir con la idea de un sueño rondando por la cabeza y no descansan hasta hacerlo realidad.
La tarea es más difícil aun cuando se trata de soñar no por uno, ni por dos, sino por toda una sociedad tan diversa y plural como la colombiana que expresa sus alegrías y dolencias a través de las manifestaciones artísticas y culturales que hoy son tangibles y visibles gracias a la acción de aquellos que traspasaron las fronteras de los sueños y se arriesgaron a hacerlos realidad.
A eso se dedicó Fanny Mickey, la mujer de sangre argentina y corazón colombiano que desde 1988, con la organización del Festival Iberoamericano de teatro de Bogotá, e incluso desde más atrás, se ha dedicado en mente y corazón a edificar nuestra vida cultural con sacrificio, entrega e impulsada, por su puesto, por el amor hacia el arte.
Desde que llegó a Colombia en 1960 siguiendo a un hombre y el amor, a esta mujer pelirroja, de buenas piernas y corazón amplio nada la ha detenido en su camino hacia la consolidación de un arte sin fronteras en donde hay cabida a todo tipo de grupos, actores, espectáculos, representaciones y públicos.
|
Los límites para Fanny no han existido y nunca existirán. Su capacidad imaginativa la han llevado a sacar de lo más pequeño lo más grande y de lo más difícil lo mejor de sí. Así sucedió en 1978 cuando le propuso a quienes la acompañaban en la tarea de ampliar y reavivar los espacios de vivencia cultural en Colombia, comprar una vieja sala de cien destartalada y abandonada para construir un sueño en donde los actores aprendieran y valieran por su arte, sus representaciones y no por su belleza; un sueño en donde no hubiera exigencias para el público sino que el público fuese un actor y un director más que exigiera a los que se movieran entre las tablas, en pocas palabras, un sueño que hoy es la Fundación Teatro Nacional .
Hoy estos dos sueños son una realidad más que latente tanto para los colombianos como para el mundo. Con la apertura de la XI edición del FITB, con el Reino Unido como invitado especial, se abren los telones de Bogotá para recibir la gestualidad de los cuerpos y los rostros de más de 1200 artistas, la diversidad cultural de cinco continentes, las representaciones artísticas de 45 países que tendrán como escenario, además de las distintas salas, a Corferias como la Ciudad Teatro donde al color y la vida se le unirán las fuerzas de miles artistas y espectadores que gracias a una mujer respirarán el aire de un sola pasión: el arte
Entrevista a Fanny Mickey
Entrevista por: Andrea Carranza Garzón. Fotografias: Salvatore Salomone.Es realmente admirable como una mujer «echada pa»™ delante», que con berraquera y mucha constancia logró consolidar la cultura teatral en Colombia; la empresaria y talentosa actriz, Fanny Mickey, ¿de dónde sale tanta fuerza y perseverancia?Desde pequeñita, de no haber tirado nunca la toalla y de no amedrentarme ante los inconvenientes de la vida. Mujer argentina, pero a la vez tan colombiana, ¿cómo la enamoró Colombia? Primero por un hombre y después por su gente ¿Qué es lo que más le cautiva del trabajo actoral colombiano? La calidad de nuestra gente, que son naturalmente grandes actores. ¿Cómo se fue forjando como actriz y a la vez como empresaria? Yo me forjé como actriz estudiando en Bueno Aires en el conservatorio. Aquí eduqué más mi capacidad de actriz. Como empresaria, no tuve más remedio porque aquí no había empresarios de teatro y como yo llegué a ser gerente de una empresa cuando tenía veinte años, mis conocimientos fueron útiles para poder manejar la parte empresarial del teatro en Colombia. Es evidente que en el trayecto de su vida se ha planteado metas y sueños y ha hecho lo posible por alcanzarlos, como por ejemplo la creación del Teatro Nacional. Todo alcanzado por el inagotable amor por el arte. Uno de los logros más importantes es el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, un evento cultural que reúne a cientos de compañías de diferentes países, y que proclama la integración artística y el amor por el arte. El impacto ha sido grande ¿qué es lo más gratificante de todo esto? El público. En la página del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá afirma que uno de los compromisos «ha sido la diversidad, la pluralidad y la representatividad de los diferentes géneros y tendencias de las artes escénicas, para propiciar a través del teatro el entendimiento y la tolerancia entre los pueblos del mundo», ¿cree que el festival ha contribuido de tal manera? Definitivamente, porque como nosotros no hacemos sólo funciones en teatros cerrados, sino mucho de teatro callejero, este público que de repente piensa que el teatro es intelectual y no lo va a entender, al verlo se enamora y vamos creando mayor público para nuestro país. Alguna vez afirmó que juzgaba una obra en la medida en que ésta le sirva al público colombiano. ¿Cómo la expresión artística contribuye a percibir la realidad del ciudadano colombiano? Está ahí todo, en la pregunta. Teatro y realidad. ¿Un mismo sentido? Sí, tienen absolutamente el mismo sentido, porque el espectador que ve una obra de teatro, se ve y se cuestiona a sí mismo, entonces entra en esa realidad. ¿Con qué sueña Fanny Mickey en estos momentos? Con que el Festival salga berracamente divino, y pueda descansar después. ¿Qué le aconseja a los nuevos talentos que ingresan al mundo de la actuación? Que si de verdad sienten eso como vocación, nunca tiren la toalla. Porque el arte cada día es más difícil. |