Bogotá, tierra ancestral de la nación indígena chibcha y morada del Salto Tequendama, se consolidó como Theatrón del Mundo.

Bogotá, tierra ancestral de la nación indígena chibcha y morada del Salto Tequendama, se consolidó como Theatrón del Mundo, al reunir 41 países conformados por 65 compañías internacionales, 176 grupos colombianos, para ofrecer unas 700 funciones creadas por 2.000 artistas, donde y más de 3.000.000 espectadores hicieron suyo el XI Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá.

Bajo el legado de una premisa visionaria “Un acto de fe en Colombia”,en 1988 una primera edición nacería gracias a Fanny Mikey y Ramiro Osorio, esta muestra a su vez festejo los 450 años de la fundación de Bogotá. En la edición XI FITB 2008, 22 salas, 5 coliseos populares, 20 parques, una Plaza de Toros, un coliseo llamado El Campín, la Catedral Primada, un complejo de espectáculos llamado Corferias como Ciudad Teatro, abrazaron con fuerzas, aquellas historias narradas a través de las artes escénicas, todas estas presentadas a la audiencia, con esa combinación de discursos, gestos, escenografía, música, sonido y espectáculo propios del apasionado arte teatral.

Cabe destacar ese sentimiento de “integración artística” del Festival, siendo uno de sus objetivos fomentar la diversidad, la pluralidad y la representatividad de los diferentes géneros y tendencias de las artes escénicas. Parte de las actividades ofrecidas al publico, fueron los conciertos, siendo el de Lila Downs (cantante de raíz indígena mixteca) y Maria Mulata (compositora originaria de Santander) uno de los mas significativos, ya que esbozaba el encuentro intimo de dos naciones la mejicana y la colombiana en notas musicales, eso se reflejo en risas y hasta lágrimas, y una vez más, se hizo gala del orgullo latinoamericano de los presentes.

Hoy por hoy, se hace indispensable propiciar las artes escénicas como ente canalizador para el diálogo entre culturas, ya que establece en sus manifestaciones, el entendimiento y la tolerancia entre los pueblos del mundo, al mismo tiempo en el teatro están presentes los indicadores de identidad cultural de los pueblos: lengua, vestimenta, pensamientos, entre otras características que tienen todos en común, porque están presentes en toda la vida de los seres humanos.

Desde su inicio el FITB ha trabajado en aras de establecerse como uno de los festivales de teatro más importantes del mundo, prueba de ello es su capacidad de convocatoria, su cantidad de funciones y su diversidad de géneros y actividades: Teatro, danza, circo, pantomima, conciertos, talleres, entre otras. A lo largo de su existencia el Festival Iberoamericano de Teatro ha sido visitado por 520 compañías internacionales, teniendo de esta manera unas 450 funciones de Teatro en salas y cerca de 150 puestas de teatro de calle.

La clausura del XI FITB, tuvo la participación protagónica de Francia por el Grupo F, conformado por tres músicos solistas, un experto en fuegos pirotécnicos, ocho actores quienes hicieron un espectáculo musical y de fuegos artificiales. Para Colombia la permanencia de este Festival, se traduce en el crecimiento artístico de su gentilicio, creando además una apertura a los ojos del mundo que deja en claro,que este país hermano hay que visitarlo y hay que vivirlo.